Para la despedida de solteros de una persona muy especial para mí, cuyo novio fue torero en su día, hice otro reto para mí.
Una tarta en forma de plaza, con todos sus detalles: sus paredes, su puerta grande, sus taquillas, sus lados de sol y sombra y como no, a los novios (el torero y la sevillana) y por supuesto, el toro en la plaza, con su arena y todo!
Corté el bizcocho de esta forma y lo cubrí, por dentro de blanco y por fuera de beige. Lo siguiente fue poner las tejas (el trabajo que tenían) y luego ir haciendo detalles para que quedase lo más real posible. Puse ventanas por los lados y cenefas encima, la puerta grande con su puerta de hierro, las taquillas al lateral… y terminé rematando con rotulos de rotulador comestible que indicaban las zonas de sol y sombra tanto por dentro como por fuera.
Por dentro estaban los novios, el torero con su capote y su traje de luces, sus hombreras, todo pintado a mano con pintura comestible; y la novia, vestida de sevillana con su vestido lleno de volantes y lunares con peineta incluida. No podía faltar el toro, el de osborne, para que no haya dudas =).Ambos colocados sobre la plaza, con su arena (todo se comía) con el burladero. En esta foto se aprecian muy bien:
Quedó preciosa, y me quedo con la frase del novio «La voy a congelar para que la vean mis nietos»…
Muchas gracias a «Popeye y a Olivia», sois estupendos!! =)